Murcia aromática
- 1h 0m
- 4 (16 uds)
- media
Recetas que maridan bien con Vino de postre Moscatel de Alejandría
¿Cómo es un Moscatel de Alejandría?
La Moscatel de Alejandría es una variedad de uva venerada por su antigüedad y su capacidad para crear vinos dulces con un perfil aromático exuberante. Originaria del norte de África, esta cepa se ha adaptado magníficamente a climas cálidos y secos, encontrando en ellos su máxima expresión.
Cuando se elabora en vino, la Moscatel de Alejandría exhibe un color dorado claro, a veces con reflejos de tonos verdosos, y una lágrima densa que anticipa su textura en boca. Al olfato, despliega un abanico de aromas intensos donde predominan las notas de frutas como el melocotón, la naranja y la miel. También pueden presentarse matices florales, especialmente de azahar y jazmín, que aportan una elegancia innegable a su perfil olfativo.
En el paladar, se caracteriza por su dulzura equilibrada, en la que la acidez juega un papel crucial para evitar la sensación empalagosa. Su paso por boca es voluptuoso, con una textura casi oleosa que permite que los sabores frutales y florales perduren, ofreciendo un final largo y satisfactorio.
La Moscatel de Alejandría es excepcional como vino de postre, maridando con armonía con dulces no muy azucarados para no eclipsar su propia dulzura. Es el acompañante ideal de frutas frescas, especialmente las cítricas, y de postres con base de almendra como el turrón. Además, su versatilidad le permite estar presente en aperitivos, donde puede realzar la experiencia de foie gras o quesos azules, creando un contrapunto gustativo de gran riqueza.
Esta variedad, por su fragancia y dulzor característico, se ha convertido en sinónimo de vinos de postre de calidad, y es una joya enológica que invita a ser descubierta por aquellos que se deleitan con los sabores dulces y aromáticos.
