Helado de menta fresca y chips de chocolate

Pasos

• En una cacerola mediana, calienta la leche entera, el azúcar blanco y 250 g de la nata montar a fuego medio. Remueve ocasionalmente la mezcla para asegurar que el azúcar se disuelva completamente y evitar que se pegue al fondo de la cacerola.
• Lava y pica finamente las hojas de menta fresca. Añádelas a la cacerola y remueve bien para incorporarlas. Retira del fuego y permite que la mezcla repose e infusionar el sabor de la menta durante al menos 1 hora.
• Incorpora el azúcar invertido a la mezcla y remueve bien. Luego, cuela la mezcla a través de un colador de malla fina, presionando las hojas de menta para extraer todo el sabor. Reserva algunas de las hojas machacadas y agrégales de nuevo a la mezcla.
• En un bol grande, coloca los 250 g restantes de nata montar y reserva.
• En otro bol mediano, bate las yemas de huevo L. Mientras tanto, calienta la mezcla de menta en la cacerola a fuego medio-bajo. Cuando esté caliente (pero no hirviendo), vierte lentamente las yemas batidas en la cacerola, sin dejar de remover constantemente. Continúa revolviendo hasta que la mezcla espese y tenga la consistencia de unas natillas.
• Vierte la mezcla de natillas de menta en el bol con la nata montar reservada. Mezcla bien hasta que estén completamente incorporados.
• Deja enfriar la mezcla a temperatura ambiente y luego refrigera por 2-3 horas o, preferiblemente, durante toda la noche.
• Utilizando una heladera
• Vierte la mezcla fría en la heladera y sigue las instrucciones del fabricante para batir y congelar el helado, normalmente entre 30-40 minutos. Cuando el helado esté casi listo, añade los chips de chocolate y permite que la heladera los incorpore uniformemente.
• Sin usar una heladera
• Si no cuentas con una heladera, vierte la mezcla fría en un recipiente metálico y añade los chips de chocolate. Mezcla bien para distribuirlos de manera uniforme. Tapa el recipiente y colócalo en el congelador durante 1 hora.
• Retira el recipiente del congelador y remueve bien el helado, prestando especial atención a los bordes, donde estará más congelado. Vuelve a tapar y congela por otra hora. Repite este proceso dos veces más, asegurándote de que el helado esté bien mezclado antes de volver a congelarlo.
• Congelación (ambos casos)
• Transfiere el helado a un recipiente apto para congelador y congela por al menos 8-12 horas antes de servir.
• Para servir, retira el helado del congelador y déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos 10 minutos antes de disfrutarlo con tus amigos y familiares. ¡Buen provecho!